El lockout, ese gran desconocido

Llevamos varios meses oyendo hablar del lockout. El culpable de que todavía no haya empezado la NBA, y también, a quien damos las gracias por poder disfrutar de algunos de sus jugadores en los equipos europeos.

Pues ya se ha  acabado. Ya se vuelven a EEUU. Pero, ¿Qué era verdaderamente el Lockout?. Si, una especie de huelga, pero ¿Qué pedían? ¿Qué se estaban jugando? ¿Tan importante era para que nos tuviera a todos en vilo?

Pues de primeras, hay que saber que no era una huelga. Al menos no como lo concebimos habitualmente. Más que nada, porque el paro lo provoca la patronal, no los trabajadores. Son los dueños de las franquicias los que paran la NBA. ¿Y por qué? Pues por lo de siempre, por lo que llevamos sufriendo ya varios años. La puta crisis.

Los dueños, se quejan que el año pasado perdieron 300 millones de dólares. Y hay que recordar que en la NBA, son dueños, no presidentes del equipo. La pasta es suya, y si hay pérdidas, las pérdidas son suyas. En estas estábamos desde hace ya varios años, pero este verano expiraba el convenio colectivo firmado tras el último lockout. Y los dueños decidieron que ya no querían perder más dinero.

Empezaron las negociaciones, ya a principios de año. Las diferencias eran grandes, y como había tiempo, se fue dejando. Cuando acabó la temporada, se vieron igual de alejados en sus posturas, pero sin tiempo de reacción. La NBA quedaba en suspenso.

¿Pero cuáles eran esas diferencias que habían podido con una industria que mueve miles de millones de dólares anualmente?

Según la prensa, todo el problema parecía estar en el reparto de los beneficios, que hasta ahora estaba en el 57-43, a favor de los jugadores. Pero esto era solo parte del pastel, y era un pastel de muchos pisos…

Para entender lo que pedían unos y otros, hay que entender el sistema financiero en el que se basa la NBA.

Conocemos el intento de igualdad entre los equipos, el draft, los traspasos intercambiando jugadores sin dinero de por medio, el que cada año pueda ganar la liga un equipo distinto… Todo este sistema deportivo se sustenta en un sistema económico, que muy por encima, se define en que todo el mundo tiene un límite de gasto. Da igual lo rico que seas, ya que solo puedes gastar un determinado dinero. Es el límite salarial. Esa es la ley. No se quiere tocar. Lo que se tocan son las trampas…

Y las trampas a esa ley se basan en dos conceptos. Impuesto de lujo y excepciones. Y son los puntos clave en las negociaciones del lockout.

El impuesto de lujo, es una multa para cuando se pasan del límite salarial. Y es una multa bastante grande. 1 dólar por cada dólar que se pasen. O lo que es lo mismo, si fichas a un jugador y ya estás en el límite, le pagas su sueldo, y una multa a la liga igual al sueldo del jugador. Imaginaos al Madrid pagando dos veces el sueldo de CR7.

Y las excepciones, son casos especiales por los que puedes fichar o renovar a jugadores, sin que esto afecte al límite salarial. Y hay bastantes casos. Por eso se pueden formar de manera puntual equipos como los actuales Lakers  o Heat.

¿Qué quieren los dueños? Reducir la posibilidad de pagar el impuesto de lujo, y reducir los límites salariales dentro de los cuales te puedes acoger a las excepciones.                       

Jordan, uno de los dueños mas duros en las negociaciones

Sé que parece contraproducente por su parte, ya que se limitan las posibilidades de hacer grandes equipos con muchas figuras, pero lo que quieren es pagar menos, aunque no ganen la liga. Y el caso es que lo han conseguido, con un aumento del impuesto de lujo que puede llegar a 4 o 5 dólares por dólar que te pases, y con la reducción en años de contrato y en límite de salario en las excepciones.

Y en que afecta a los jugadores. Renovaciones con sueldos más limitados, menos años de contrato, y sobretodo, sueldos más bajos para los que no son grandes figuras. Los jugadores que completan los equipos. En verdad, la mayoría de los jugadores, que eran los que más se beneficiaban de las excepciones.

Nos tendremos que olvidar de superequipos como Lakers, Heat, Celtics… Y quién sabe si a alguno no le vendrá bien aceptar alguna gran oferta de equipos europeos. No serán superestrellas, pero para Europa, pueden ser muy importantes.

¿Volveremos a ver equipos como estos?

Claramente los dueños son los ganadores de esta batalla, porque han sabido jugar muy bien con las presiones que se han creado entre los jugadores. Y creo que no todos los jugadores se habrán sentido respaldados por los interlocutores que les han representado en las últimas reuniones, aunque estos aparezcan como los héroes que nos han devuelto la NBA. Si fueran CCOO o UGT, y nos dieran ese nuevo convenio a todos los trabajadores, les quemaríamos en la hoguera.

Lo bueno, tenemos NBA. Lo malo, algunos pensarán, que ya no veremos a los NBA por Europa. Seguro que el Regal Barcelona no está entre esos algunos…

Nos vemos en 10 años, en el siguiente lockout…